Con el objetivo de recuperar y conservar los suelos en Guatemala, el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA) firmó un proyecto conjunto con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), llamado «Mapeo de suelos para sistemas agroalimentarios resilientes en Centroamérica y África subsahariana (SoilFER)».
SoilFER proporciona información y datos actualizados, junto con herramientas y plataformas integrales para agricultores y gobiernos. Además, fortalecerá las capacidades técnicas y tecnológicas en diversos aspectos, contribuyendo al desarrollo sostenible y la autosostenibilidad tanto para el gobierno como para las nuevas generaciones.
El MAGA, ya ha realizado estudios semidetallados de suelos en Chimaltenango, Sacatepéquez, Sololá, Escuintla y Guatemala. Además, se encuentran en proceso estudios en San Marcos, Totonicapán, Quetzaltenango, Chiquimula y Zacapa. Estos estudios mejoran la planificación de la agricultura, los recursos naturales y son fundamentales para el proceso de ordenamiento territorial y el desarrollo nacional. Además, se refleja en mejoras de la economía familiar rural.
«Es importante para nosotros este tipo de proyectos, porque permite tecnificar el agro. Le hemos apostado al tema de conservación y recuperación de suelos y creemos importante la formulación de los estudios.”, manifestó el ministro de agricultura, Edgar De León.
Según datos de la FAO, las pérdidas anuales de suelo por erosión y degradación en Guatemala se contabilizan en toneladas al año. En respuesta a esta problemática, el MAGA, imparte capacitaciones y asistencia técnica para frenar la erosión y evitar pérdidas en las cosechas, donde se promueve el uso de abonos orgánicos, no solo para recuperar nutrientes en las cosechas, sino también para el cuidado de los bosques.
“Como sabemos, los suelos son la fuente vital para que agricultores produzcan el 95 % de nuestros alimentos. Esta producción está sujeta a muchas variables, entre ellas la fertilidad natural del suelo, por lo que, es crucial para la seguridad alimentaria y nutricional y la lucha contra la pobreza disponer de suelos fértiles, suelos saludables”, detalló el representante de FAO, Ricardo Rapallo.
“SoilFER, es un modelo que reconoce la base del suelo, y su vulnerabilidad”, expresó la oficial en Agricultura de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), Kathryn Begeal.