Los macrotúneles son estructuras agrícolas que se utilizan para proteger los cultivos de factores climáticos adversos como el viento, la lluvia o el exceso de sol, con el propósito de extender el periodo de producción. Son hechos de arcos metálicos o de cubiertos de PVC, con plástico, lo que crea un ambiente controlado para los cultivos. Este sistema permite mejorar las condiciones de crecimiento y reducir las plagas.

A diferencia de los invernaderos tradicionales, los macrotúneles son más económicos y flexibles, ya que pueden instalarse y desmontarse fácilmente. Son muy utilizados en la producción de hortalizas, frutas y flores, especialmente en regiones con climas extremos o estaciones de cultivo cortas. Estos túneles contribuyen a la sostenibilidad agrícola al optimizar el uso del agua.