Esta es una planta de clima templado que se cultiva ampliamente en todo el mundo, apreciada por sus hojas comestibles. Requiere suelos bien drenados, ricos en materia orgánica, Las semillas se siembran en almácigos y luego se trasplantan al campo cuando las plántulas alcanzan un tamaño adecuado.

El ciclo de cultivo del repollo suele durar entre 90 y 120 días, dependiendo de la variedad y las condiciones climáticas. Este cultivo es sensible a temperaturas extremas, ya que el frío intenso puede dañar las hojas y el calor excesivo puede afectar la formación de las cabezas. La recolección se realiza cuando las cabezas están bien formadas y compactas, y debe hacerse con cuidado para evitar daños que puedan afectar la calidad del producto en el mercado.