Con el objetivo de apoyar a acuicultores de Chiquimula para que emprendan en la producción y la comercialización de alevines, 22 familias recibieron apoyo con capacitación; asistencia técnica, geomembrana y tubería PVC, para la construcción de su estanque en el 2020.
Los beneficiarios recibieron además, 250 alevines y 7.5 quintales de concentrado para los peces. Se estima que en cuatro o cinco meses, pueden contar ya con producto apto para el consumo.
Las familias que pertenecen a los 11 municipios de Chiquimula, recibieron sus alevines y el concentrado en la segunda semana de julio. Anteriormente se les apoyó con la construcción de su estanque.
“Se les ubicó el espacio físico para establecer el estanque, se verificó que el área no tuviera material vegetativo. Luego se les apoyó en la colocación de la membrana que donó la FAO para cada estanque, la cual ayuda a mantener más tiempo el agua. Una vez ya arreglado, se empieza llenar, hasta que tome una coloración adecuada para mantener el alevín”, explicó Gustavo de León, jefe de sede departamental de Chiquimula.
A los beneficiarios de este año, se suman las 42 familias, atendidas en el 2019. Esas familias a la fecha han tenido dos cosechas de alevines. Aunque el pez que reciben no es para reproducción, si crece hasta pesar al menos una libra.
Se estima que de la producción total, entre el 10% y 15% es consumido en el hogar del acuicultor, un 2% queda de margen para la pérdida y el resto lo venden. Es así como las familias logran tener ingresos de Q.4800.00 aproximadamente Y generan autosostenibilidad.
Este apoyo llega a las familias gracias a una alianza del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA) y el programa Mesoamérica Sin Hambre (MSH-AMEXCID) de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés).
Con este programa, el MAGA brinda capital semilla a las familias que deseen iniciarse como acuicultores. Cada productor es beneficiado de acuerdo a criterios como: su disponibilidad de espacio para el estanque, voluntad para trabajar y recibir capacitación, seguimiento antes, durante y después del proceso, pero especialmente que tengan acceso al agua.