Las legumbres, frijoles, lentejas, garbanzos y guisantes son, entre otros, alimentos muy nutritivos y sostenibles que aportan una gran variedad de beneficios para la salud, así como para la economía de los agricultores y el medio ambiente.
También son una excelente fuente de proteínas vegetales, esenciales para el crecimiento y mantenimiento del cuerpo, bajas en grasa y ricas en fibra y proteínas. Las legumbres ayudan a generar sensación de saciedad, contribuyen al control del apetito y son una opción saludable para el control del peso, pues la fibra ayuda a la digestión, previene el estreñimiento y mejora la salud intestinal.
Las legumbres aportan hierro, magnesio, zinc y vitaminas del grupo B, que son esenciales para la salud del sistema nervioso y la producción de energía. Ayudan a mantener niveles estables de azúcar en la sangre, lo que es beneficioso para personas con diabetes.
Las legumbres no solo son beneficiosas para la salud, sino también para el medio ambiente y la economía. Incorporarlas en la dieta es una manera efectiva de mejorar la nutrición y contribuir a un sistema alimentario más sostenible (JG/ea).