Luego de los rebrotes de gusano barrenador en Panamá y Costa Rica, Guatemala trabaja en la prevención de esta enfermedad y para ello se desarrolla La Antigua Guatemala, el taller nacional de Metodología de Buena Gestión de Emergencias (GEMP).
Fortalecer las capacidades de los servicios veterinarios oficiales y el plan de respuesta a enfermedades animales, emergentes y reemergentes, incluidas las zoonóticas, es una prioridad para proteger el patrimonio ganadero del país.
Por ello es necesario contar con más y mejores herramientas para prevenir la presencia del gusano barrenador y el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA), por medio del viceministerio de Sanidad Agropecuaria y Regulaciones (VISAR), en conjunto con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la
Agricultura (FAO) y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), organizaron éste taller.
Guatemala se encuentra libre de estos parásitos desde el año 1994, pero Panamá y Costa Rica, que habían erradicado esta miasis desde mediados del 2006, ahora enfrentan nuevos brotes.
La viceministra a cargo del VISAR, Marissa Montepeque Sierra, detalló que se prepara la vigilancia epidemiológica y la educación sanitaria con ganaderos en las fronteras con Honduras y El Salvador, principalmente en los pasos de ganado hacia el departamento del Petén.
“Las buenas prácticas de gestión de emergencia en sanidad animal son una herramienta metodológica para organizar y mejorar las capacidades de los servicios veterinarios de los países”, afirmó Montepeque Sierra.
Es importante mencionar que, en el pasado, Guatemala ha erradicado exitosamente al gusano barrenador y a la peste porcina clásica. Además, el programa de sanidad avícola Prosa, ha manejado exitosamente la influenza aviar H5N2 de baja patogenicidad.
El evento GEMP se centra en detalles acerca de los animales contaminados por el gusano barrenador y el efecto que tiene en los mamíferos de sangre caliente, pues impide su engorde, reduce la producción de leche y, en el caso de las crías, puede provocar la muerte inmediata.
Este parásito se transmite a través de las heridas del ganado y las moscas son utilizadas como transporte.
Entre las acciones que ayudan a evitar la propagación del gusano barrenador se encuentran las parrillas aéreas, en las cuales se dispersan moscas estériles para reducir la población de estos parásitos.