En un esfuerzo para controlar la presencia de la langosta voladora, en la aldea Las Maduras de Champerico, Retalhuleu, se realizó una evaluación de la densidad insectos adultos y así prevenir un posible incremento de su población, lo que tendría un impacto económico considerable en la costa sur de Guatemala.
Esta actividad beneficia directamente a 300 familias que arriendan tierras para cultivar maíz y ajonjolí, así como a 2500 agricultores y agricultoras de 15 comunidades aledañas, en el área afectada por la langosta voladora.
En Retalhuleu se protege una superficie cultivada de 90 mil 400 hectáreas, de las cuales 59 mil 700 corresponden a la agricultura campesina (30 mil 400 de maíz y 29 mil 300 de ajonjolí), y 30 mil 700 a la agricultura de exportación, que incluye mango, sandía, melón, cítricos, aguacate, coco, entre otros productos.
El Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA), a través de la Dirección de Sanidad Vegetal y el Viceministerio de Sanidad Agropecuaria y Regulaciones (VISAR), desempeña un rol vital en la protección y conservación de los cultivos, contra las plagas y enfermedades de importancia cuarentenaria.
En Retalhuleu el MAGA implementa estrategias de monitoreo y control de la langosta voladora, en colaboración con diversas entidades públicas y privadas, con el objetivo de garantizar la seguridad alimentaria y proteger la economía local.