Lograr obtener un rendimiento óptimo en el cultivo del aguacate, implica que se deben conocer los diferentes aspectos que determinan la calidad de este fruto. Estas son las características que predominan en el país, las cuales se deben aprovechar y conocer en este cultivo.
En primer lugar, la temperatura óptima debe oscilar entre los 10 o 17 grados centígrados, las cuales se manifiestan en regiones con altitudes que van desde los mil quinientos a los dos mil metros sobre el nivel del mar. Aquí ubicamos, entre otros, a los departamentos de Quiché, Huehuetenango, San Marcos, Chimaltenango, Sololá y Sacatepéquez.
En cuanto a la humedad relativa, debe oscilar entre el 80% al 85%, en fotoperiodo anual de 980 a 1200 horas luz, según la Dirección de Fruticultura y Agroindustria (DEFRUTA) del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA).
En relación a la composición de los suelos, se recomienda que estos sean de textura franca. Sin embargo, el cultivo se puede lograr en cualquier otro tipo de textura media, que tenga suficiente profundidad para que las raíces se puedan desarrollar óptimamente. El terreno no debe tener más de 25% de pendiente.
Otros aspectos importantes es aplicar sistemas de riego en plantaciones, un plan de manejo que incluya fertilizantes, control de plagas, muestras de suelo, podas y un buen manejo postcosecha.
El MAGA a través de DEFRUTA de la Dirección de Desarrollo Agrícola del Viceministerio de Desarrollo Económico Rural (VIDER), fomenta la producción de aguacate en zonas potenciales, brindando atención en los aspectos del cultivo. Con esto se cumple con el objetivo tres de sus lineamientos estratégicos: “Facilitar el acceso a infraestructura productiva, innovación, tecnología y servicios de apoyo a la producción”.